sábado, 2 de enero de 2010
Hay que parar a la FPL
Por: Jorge Gastón
Las noticias nos llegan. Los planes de la Florida Power and Light (FPL) de Miami-Dade incluyen la instalación de dos nuevos reactores nucleares en Turkey Point para servir a nuevos clientes.
Por dos de nuestros parques nacionales y la US1 muy cerca de escuelas, hospitales, residencias y negocios corren Líneas de alto poder de voltaje en postes de 80’ y 105’ de altura. De acuerdo con literatura médica reciente, los porcentajes de Alzheimer, cáncer y demencia senil crecen el doble en personas que residen cerca de esas Líneas de Poder. La FPL actualmente provee electricidad a 4.5 millones de clientes y de ellos pretende ahora colectar la friolera de 18 billones de dólares para 750 mil nuevos hogares. Esos hogares no están en Miami-Dade. Ingenieros de la poderosa empresa admitieron que esos dos reactores así como 230KV líneas de poder están planificados para cubrir el norte del estado.
De las 430 plantas de energía nuclear en el mundo, hasta ahora, dos han explotado: Chernobil y Three Mile Island. Sería bueno ver cuán cerca estamos nosotros de Turkey Point. Además, la FPL mantiene todo su desperdicio nuclear por encima del nivel del suelo y por tiempo indefinido. Se conoce que la empresa ha tenido problemas con personal técnico que han denunciado fallas en la seguridad del funcionamiento de la planta y se han expresado contrarios a la instalación de los dos nuevos reactores sin contar con los elementos de seguridad previos a ese delicado y peligroso proceso. Prácticamente a todos los han despedido. Y para complicar más las cosas, Turkey Point está acelerando la entrada de agua salada en los pozos de los campos que abastecen del precioso líquido al sur de Miami-Dade, Homestead y los Cayos.
Solo la actuación firme de la población exigiéndoles a los políticos que hagan algo para parar a este monstruo de empresa en su ambición desmedida por ganar más y más a costa de nuestra salud y bolsillos, podrá bloquear el proyecto de la FPL para que no construya más plantas nucleares. Hay que enviar mensajes al gobernador Christ y a los legisladores para que cumplan con la función primordial que los llevó al poder, es decir, la defensa de nuestros intereses y el bienestar de nuestras familias.
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